Diócesis de Temuco

Parroquia San Pablo de Carahue se llevó la Copa Centenario en el Primer Campeonato de Baby Fútbol

En las canchas del Campus Norte de la Universidad Católica de Temuco se jugó la última fecha del Primer Campeonato de Baby Fútbol organizado por la Vicaría para los Jóvenes, donde resultó campeón uno de los equipos de la parroquia San Pablo de Carahue, y en segundo lugar quedó la Parroquia Espíritu Santo de Temuco, el  tercer lugar fue para la Parroquia San Miguel Arcángel de Nueva Imperial, y el cuarto lugar se lo quedó la Parroquia San Buenaventura de Angol.

Con barras incluidas, los equipos jugaron la última fecha del campeonato que reunió a 14 equipos en total, y el Vicario para los Jóvenes, Pbro. Sandro Leonelli, dijo que “Los jóvenes, hombres y mujeres participaron activamente de manera muy profesional, desde el punto de vista de la fe pudimos establecer que el deporte es una disciplina a través del cual también podemos vivir los valores de la alegría, fraternidad, respeto, solidaridad y competencia, además de hacer del deporte un medio de evangelización, de formación humana donde podemos ir descubriendo virtudes del evangelio, virtudes cristianas y enseñanzas de nuestro Señor Jesucristo”, agregando que se esperan nuevas versiones del campeonato.

La Vicaría para los Jóvenes fue la organizadora del evento, y en su representación, José Ramírez, quien es miembro del consejo diocesano de la VIJO, señaló que “Este campeonato deportivo, fue una excusa perfecta para encontrarnos con Jesús de una manera sencilla y real. Dios se hace presente en lo cotidiano, en la risa, en el esfuerzo compartido y en el compromiso con los demás. Uno de nuestros grandes desafíos ha sido volver a encender la llama de las pastorales juveniles en nuestras parroquias. Y, con mucha gratitud delante de Dios, hemos visto que este campeonato ha sido un impulso en esa dirección. La respuesta que tuvimos lo deja claro: los jóvenes están ahí, solo hay que ir a buscarlos  y acompañarlos. Y vamos a seguir trabajando para que en cada parroquia vuelva a latir una pastoral juvenil fuerte, presente y viva”.

En la coordinación, estuvo también Fernando Torres, que destacó sobre el campeonato que “los jóvenes querían un encuentro que pueda juntar y reunir a todos en otra instancia eclesial. El Papa Francisco lo reforzó en una jornada diciendo que no nos quedemos solamente en la Iglesia, que salgamos, que hagamos lío, que nos movamos, juguemos y pateemos hacia adelante. Y aún más, enmarcado en el centenario de la Diócesis, para celebrarlo y reunirnos de una manera distinta con los jóvenes. Fueron dos fases para que los decanatos pudieran vivir este campeonato entre las mismas comunidades, así fortalecíamos las relaciones en los territorios, y se creaba comunidad, liderazgo y gestión”.

Maritza Wegner, es asesora laica de la Pastoral Juvenil de la parroquia San Pablo de Carahue, enfatizó que “fue bastante significativo el que nos llegara esta invitación a este encuentro deportivo. Los chicos se motivaron bastante, tanto así que presentamos dos equipos, y ambos llegaron a cuartos de final. Se sintió la motivación que tenían los chicos de participar. Agradecemos muchísimo el apoyo que tuvimos de parte de nuestro párroco, de los catequistas y de muchas personas más que nos ayudaron a avanzar, y así poder llegar a esto, que fue ser campeones de esta primera copa centenario. Fue gratificante ver cómo los chicos el día domingo presentaron esta copa a la comunidad parroquial en la misa. La alegría de esas personas y también la alegría de los chicos al ser bien recibidos por su comunidad parroquial”.

En las bases, se estipulaba que podían participar dos personas externas a las pastorales, y justamente, Axel Rojas quien jugó con el equipo ganador, llegó de refuerzo y fue reconocido como el goleador de la jornada, y con emoción expresó que “fue una experiencia muy bonita el poder participar de este campeonato, yo nunca pensé salir goleador”, añadiendo que tras su participación, le gustaría seguir participando de la pastoral juvenil.