Diócesis de TemucoEl Año Jubilar comenzó en Nochebuena del 2024, y fue el Papa Francisco quien abrió la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, en Roma.
En el Templo Catedral de Temuco, este sábado 27 de diciembre se reunieron sacerdotes, diáconos y fieles para celebrar la Eucaristía que dio término al Jubileo de la Esperanza, acompañados por el Coro Centenario.
La Santa Misa, fue presidida por monseñor Jorge Concha Cayuqueo, y concelebrada por el Vicario General, Pbro. Juan Andrés Basly y el Vicario Pastoral, Pbro. Giglio Linfati, quienes junto a sacerdotes, diáconos y fieles de algunas comunidades de la Diócesis, reflexionaron en torno al Año Jubilar que coincidió con los 100 años de la Diócesis San José de Temuco.
En la Diócesis, se celebraron más de 12 Jubileos, y monseñor Concha enfatizó que “con la gracia del perdón que celebramos en el Jubileo, Dios nos devuelve la vida, nos reincorpora en su proyecto de salvación, ese que lo pensó desde siempre. El perdón jubilar no es solo un hecho íntimo y espiritual, sino que partiendo de la relación personal con el Señor tiene consecuencias en lo social, en la relación con los demás y en la justicia con los semejantes”.
Mientras el pastor diocesano comentó a los fieles que “la celebración del Jubileo nos exige hacer un esfuerzo por vivir lo más posible en la justicia entre nosotros, por caminar en justicia, por dejarnos perdonar por Dios o abrirnos al perdón de Dios y perdonar a los demás”, hizo el llamado a trabajar sobre la base de lo recogido durante este 2025, agregando que “en la Diócesis hay mucha riqueza en las personas, en las parroquias y comunidades, en la inmensa mayoría de hermanos y hermanas se aprecia alegría, disponibilidad, entusiasmo y deseo de trabajar, casi desbordante. Afortunadamente es así, y es porque Dios está en el corazón de cada uno”.
Las comunidades parroquiales, cerraron el Año Jubilar el 28 de diciembre, mismo día que se cerró la penúltima Puerta Santa. El 6 de enero a las 9:30 (Hora de Roma), el Papa León XIV cerrará la última Puerta Santa en la Basílica de San Pedro, la misma que Francisco abrió el 2024.
